- Lavar a mano con cuidado o en la lavadora con un programa para prendas delicadas de lana
- Usar un detergente suave especial como Perlan Lana y Ropa Delicada
- Evitar las sacudidas mecánicas (frotado, escurrido, etc.)
- Extraer el agua prensando la prenda con una toalla
- Secar en horizontal sobre una superficie plana
Los jerséis, chaquetas y bufandas de lana pueden perder su brillo al lavarlos. Para evitar que esto suceda se debe utilizar un programa de lavado adecuado y un detergente para lana. Perlan Lana y Ropa Delicada con extracto de bambú y bálsamo para las fibras del tejido cuida de tu ropa en cada lavado, aportándole una maravillosa sensación de suavidad.
Cuando las fibras de la lana se sacuden mecánicamente durante los procesos de frotado, escurrido o prensado, sus delicados filamentos se entrelazan. Lavar la lana a una temperatura excesivamente alta también puede hacer que sus fibras se hinchen. Si además se utiliza un detergente universal o para ropa de color, en vez de uno específico para lana, podemos dañar aún más la prenda, llegando a provocar orificios en el tejido. Esa es la razón de que se recomiende utilizar Perlan Lana y Ropa Delicada.
Si la etiqueta indica que la prenda se puede «lavar en lavadora» o es «lana lavable en lavadora», no hay problema. En ese caso se puede utilizar el ciclo para el lavado de lana con un centrifugado de unos 20 segundos. Las prendas muy delicadas de lana también se pueden introducir en la lavadora si se utiliza un «programa manual para lana», en cuyo caso te recomendamos que uses Perlan Lana y Ropa Delicada. Su espuma especial forma un grueso cojín que protege las prendas de las vibraciones mecánicas de la máquina, así como durante el lavado a mano.
El plumón es muy elástico, y su capacidad para calentar sin añadir peso lo convierte en el material ideal para la elaboración de ropa de cama y prendas de invierno de alta calidad, cómodas y cálidas. El plumón se debe lavar en el ciclo para lana y prendas delicadas a 30 °C y con Perlan Lana y Ropa Delicada, por ejemplo. Para secar la ropa de cama y las prendas con relleno de plumón, extiéndelas sobre una superficie plana y sacúdelas de vez en cuando. También puedes meterlas en la secadora a baja temperatura.
La ropa interior, las prendas moldeadoras y las medias están formadas por fibras artificiales como la poliamida, el poliéster o el poliacrilonitrilo, que a menudo se mezclan con pequeñas cantidades de otras fibras como la viscosa o el algodón. Estas fibras tienen muchas cualidades positivas: mantienen bien su forma, no se arrugan, son fáciles de lavar, se secan rápidamente y no suelen necesitar planchado. Los tejidos sintéticos de color no se deben lavar a más de 40 °C y, a ser posible, con Perlan Lana y Ropa Delicada. La colada se debe tender húmeda y dejar secar sin que le dé el sol directamente. Si es necesario planchar las prendas, es mejor hacerlo a baja temperatura y colocando un paño húmedo encima.
El lino es uno de los tipos de tejido más antiguos del mundo y se elabora a partir de las fibras que forman el tallo de la planta del mismo nombre. Es un material muy duradero, de superficie satinada, no hace bolas y es bastante resistente a las manchas. Se recomienda lavar el lino teñido sin blanquear utilizando el programa de cuidado delicado a un máximo de 40 °C con Perlan Lana y Ropa Delicada. Estira bien las prendas antes de tenderlas para dejarlas secar. El lino no se debe secar nunca bajo el sol directo ni en la secadora. En cuanto al planchado, lo mejor es hacerlo por la cara interior de la prenda mientras esta está aún húmeda.
La seda se extrae de los capullos que tejen los gusanos de seda y es una de las fibras más apreciadas del mundo. Las prendas de seda se deben separar por colores antes de proceder a lavarlas, ya que suelen desteñir durante el proceso. Utiliza el ciclo para lana o prendas delicadas a 30 °C, o bien el programa especial para seda, si dispones de él. Si la etiqueta especifica que el artículo se debe lavar a mano, entonces se recomienda hacerlo rápida y suavemente en un baño de espuma templada, a no más de 30 °C, y procurando no frotar, restregar, escurrir ni ejercer presión sobre él; o bien lavarlo a máquina con un programa manual especial o un ciclo para lana. La seda no se debe dejar nunca en remojo ni con espuma durante un largo periodo de tiempo. Se recomienda secar los artículos de seda estirados sobre una superficie plana, aunque en el caso de blusas y camisas es mejor tenderlas en una percha. Mantén la seda alejada de los radiadores y la luz directa del sol. El planchado se recomienda hacerlo por la cara interior mientras está aún húmeda.
Se recomienda lavar la ropa térmica elaborada con tejidos de membrana o microfibras con Micolor Fresh en un ciclo para ropa delicada, con mucha agua y un centrifugado a baja velocidad. A continuación, solo queda tender.
Los tejidos elaborados con fibras sintéticas son una invención moderna. Lo ideal es lavarlos utilizando el programa de cuidado delicado a un máximo de 40 °C con Micolor Fresh. Este detergente especial penetra en el interior de las fibras durante el lavado y neutraliza los malos olores. Luego solo hay que tender y dejar secar las prendas, procurando evitar la exposición directa al sol.
La viscosa es una fibra recubierta de materiales naturales químicamente alterados. Su tacto sedoso, ligereza y caída hacen de la viscosa un tejido muy demandado en el sector de la moda. Si la etiqueta de instrucciones de cuidado lo permite, se puede lavar a máquina sin problemas. La viscosa reacciona a las sacudidas mecánicas del lavado, por lo que siempre se debe utilizar el programa de cuidado delicado y dejar al menos un tercio del tambor vacío. Los tejidos de este material solo necesitan pasar por un breve ciclo de centrifugado a baja velocidad antes de colgarlos en el tendedero para dejar secar (nunca en la secadora). El planchado se puede realizar cuando aún estén húmedos o usando un trapo húmedo para cubrirlos. Si la viscosa se arruga durante el secado, se recomienda humedecerla y plancharla.